El Renacimiento y la Iglesia
A pesar de que hay algunos fuertes contrastes, en su mayor parte, la influencia y el prestigio de la Iglesia Católica estaba en declive. El pensamiento humanista aceptó las mayores instituciones de la iglesia que estaban profundamente arraigados en las tradiciones y las formas tradicionales de pensamiento.
En el pasado, la Iglesia Católica había sido una parte importante del sistema que se basa en las alianzas entre señores y vasallos (el sistema feudal).Durante el Renacimiento, las demandas de la sociedad cambió y se convirtió en base a dinero en lugar de lealtades. La iglesia tuvo un momento difícil adaptarse a esta nueva forma de pensar. Por ejemplo, los párrocos y monjes habían servido siempre y cuando los maestros religiosos de los campesinos, pero a medida que la clase comercial comenzó a crecer, los sacerdotes encontraron que sabían muy poco acerca de las necesidades de esta nueva clase de personas.
La estima de la Iglesia también se vio afectada ya que algunos líderes de la iglesia violado las leyes bíblicas que habían recibido el encargo de defender y vivido de manera diferente que los comerciantes seculares y figuras políticas.Esto se vio agravado por la realización de los nuevos monarcas que, a fin de que para mantener el poder, con el apoyo de la iglesia no era tan importante como en el pasado.
A pesar de que las iglesias influyen en la política se estaba debilitando, como puede verse por la cautividad de Babilonia y el Gran Cisma, la popularidad de la religión fue creciendo. Este crecimiento continuó a través de los siglos 14 y 15 y alcanzó su punto culminante durante el siglo 16, conocida como la Reforma.
La Iglesia Católica en decadencia
La corte papal fue humillado cuando, en el siglo 14, el rey francés les obligó a Aviñón. Este movimiento forzó hizo que los líderes más altos iglesias parecen ser los peones de Francia. La iglesia, en vez de proveer liderazgo espiritual y la dirección de la sociedad que cambia rápidamente y de clase, se preocuparon por el personal de administración y de los procesos y con la recaudación de ingresos
Los problemas se agravaron durante el Gran Cisma, cuando los papas rivales competían por el control de la iglesia. El resultado final debilitado aún más la influencia política de la iglesia.
Hubo líderes dignos de la Iglesia Católica en estos tiempos. Nicolás V (siglo 15 a mediados) y Pío II, que siguió su papado, se supo, los líderes piadosos y nobles de la iglesia.
También hubo otros dirigentes, como Alejandro VI (papa en 1492), Julio II y León X, que estaban preocupados principalmente con la política, la promoción de sus familias y el mecenazgo de las artes. Estas papas debilitado aún más la capacidad de la Iglesia Católica para influir en la sociedad y la política.
Con su influencia debilitada, la iglesia encontró su autoridad papal cada vez más cuestionada, tanto a nivel local y nacional. Estos desafíos a la autoridad papal, conocida como la herejía, floreció y se convirtió en la crítica más abierta y numerosa.
Crecimiento religioso
La preocupación de la condición de las iglesias fue el resultado de la fuerza de la iglesia, no la debilidad. La influencia de la Iglesia Católica se estaba debilitando, pero no fue cada vez mayor popularidad de la religión en todas partes de Europa.
La religión comenzó a cambiar. Predicadores, como Savonarola de Florencia, pidió a los pecadores al arrepentimiento. Un movimiento, que surgió en parte de la alemana Echhart místico, creció en el oeste de Alemania, en la zona de Renania. Este movimiento cree en revelaciones directas de Dios sin la iglesia como un intermediario.
La fe común y metafísica de la Iglesia Católica fue cuestionado en Bélgica, Luxemburgo y los Países Bajos por un movimiento conocido como la "devoción moderna". Este grupo hizo hincapié en la fe individual y la práctica en oposición a la fe común y metafísica de la Iglesia Católica.
Estos movimientos, junto con sus diferentes creencias, representa una amenaza a la religión tradicional. Los movimientos heréticos populares continuó creciendo y continuó desafiando la autoridad papal. Algunos de estos movimientos incluso propuso acabar con la Iglesia Católica como institución.Durante el siglo 14, el filósofo británico John Wycliffe comenzaron a formalizar sus ataques en sus enseñanzas y escritos. Un bohemio, Jan Hus, también escribió acerca de estas cosas.
Estos herejes se hizo popular a causa de sus ataques, pero se mantuvo como una pequeña minoría. La mayoría de los reformadores de la esperanza de cambiar la Iglesia Católica, no quitarla.
Un teólogo particularmente influyente, Jean de Gerson, de la Universidad de París en el año 1500 se apoyó la teoría conciliar. Esta teoría tiene por objeto reformar la Iglesia Católica mediante la eliminación de la suprema autoridad del Papa y de colocarlo en un concilio
general.
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El llamado a la reforma no era sólo de los forasteros, Nicolás de Cusa (el "legado papal" o representante oficial del Papa) seguido políticas de la iglesia de reforma dirigidas directamente a los monjes que habían violado los votos monásticos.
El reformador más exitoso de todos fue el cardenal Jiménez de España. Se establecen normas para la formación, la disciplina y calificaciones para el clero español. Ninguna de estas reformas se extienden por toda Europa. Había un montón de personas que estaban descontentos con la iglesia, pero también hubo un montón de personas que pensaban que la iglesia podría ser mejorado con las reformas básicas.